Varios ataques bajo las mismas circunstancias, o el mando de la unidad es un inepto o la unidad esta infiltrada o la guerrilla tiene mejor inteligencia en el sitio que el eje.
Identifican a los 14 militares muertos y 8 heridos en emboscada de las Farc en Arauca
Sargento Segundo Walter Orlando Quiñones Becerra
Cabo Tercero Luis Ricardo Aguirre Terán
Soldado profesional Jeisson Albeiro García Bonilla
Soldado profesional Arley Mardonio Garzón Rojas.
Soldado regular Fernando Bueno Núñez
Soldado regular Héctor David Coronel Antolinez
Soldado regular José Antonio Galeano Garavito
Soldado regular Erley Díaz Ardila
Soldado regular Cristian Isaac Suárez Reyes
Soldado regular Luis Enrique Gutiérrez Ortíz
Soldado regular Jonathan Argenis Criollo Casas
Soldado regular Brajhan Felipe Espítia Vilaro
Soldado regular José Luis Duarte Jiménez
Soldado regular David Sebastián Galvis Forero.
Los soldados heridos
Soldado regular Oscar Díaz Maldonado
Soldado regular Jader Hernández Hernández
Soldado regular Juan Anacona Bueno
Estos dos últimos reciben atención médica en el hospital San Vicente de Paúl en Arauca.
Otros dos uniformados fueron remitidos al hospital Militar en Bogotá.
Los soldados profesionales Franklin Murillo, Camilo Esneider Guerra, Alexander Rolón Palacios y Carlos García Criado, presentaron lesiones leves de aturdimiento y desarticulación de huesos, siendo valorados en el hospital San Antonio de Tame.
Reitero lo dicho anteriormente que para eso es que se necesitan los vehiculos APC para que no les sigan dando estas pelas al ejercito, pero los culpables de estas tragedias es Santonto y los anteriores presidentes, sumado a los ineptos oficiales y generales + mindefesa que no gestionaron este tipo de compras oportunamente, a ver si se pellizcan o se sacan del pelo porque parecen unos maniquís inertes, como que les invade el importaculismo la vida de cada soldado de la patria, parece como que no les conviene que se acabe la guerra.
Más muertos.... y ni por esas la mesa en la Habana se mueve, pero al primer reclamo campesino, Santinflas se levantó de la mesa y ordeno que sus ministros regresaran, que doble moral... y que falta de consideración con los Soldados de Colombia, ¿cuantos más tienen que morir "bobamente" para que este tipo se decida a golpear con fuerza a esta manada de terroristas???
Paz en la tumba de estos heroes, y que por favor alguien haga algo, porque este país le quedó grande a la caricatura que tenemos por presidente...
Esos soldados estan muriendo por confiados, el ejercito se esta llenando de soldados sin preparación, por eso la guerrila se los esta comiendo vivitos,
Esos soldados estan muriendo por confiados, el ejercito se esta llenando de soldados sin preparación, por eso la guerrila se los esta comiendo vivitos,
El ejército colombiano ayuda a reconstruir aldeas tribales indígenas devastadas por las FARC
MEDELLÍN, Colombia — Justo después de la medianoche del Día de Año Nuevo, el líder de la tribu Embera Katío, Reinaldo Domico —antropólogo y activista de los derechos indígenas— estaba cambiando la música en su estéreo cuando un hombre irrumpió en su casa en las montañas norteñas de Colombia. El asaltante, enmascarado por un pasamontañas negro, le disparó a Domico cuatro veces en la espalda y la cabeza.
El asesino de Domico no ha sido identificado ni capturado, pero otros miembros de la tribu Embera Katío especulan que Domico fue asesinado a causa del sus esfuerzos por trabajar con el gobierno colombiano, incluyendo el ejército, para reconstruir su aldea.
“Desde el momento que tomamos la decisión de trabajar en conjunto con el estado, hemos sido objetivo”, dijo Héctor Torres, otro líder tribal de Embera Katío, en un foro patrocinado por el Ejército el mes pasado en Medellín. “Pero decidimos correr el riesgo porque cruzarnos de brazos y ver a nuestra gente morir de necesidad no es una solución”.
La aldea de Torres, en la reserva de Jaikerazabi al noroeste de Colombia, ha visto los beneficios de la cooperación con el ejército. En 2011, se convirtió en el primero de nueve pueblos indígenas que la 7ª División del ejército está reconstruyendo — en una región cuyas tribus durante mucho tiempo se han visto lanzados a conflictos entre las guerrillas de la izquierda y los paramilitares de la derecha y pandillas de narcotraficantes.
El Gen. Hernán Giraldo es ‘la fuerza impulsora’ detrás del proyecto
La fuerza impulsora detrás del involucramiento del ejército en la reconstrucción de Jaikerazabi era el Gen. Hernán Giraldo, comandante de la 7ª División.
Bajo las órdenes de Giraldo, los ingenieros del ejército construyeron carreteras, escuelas, salones comunitarios y un centro de salud en Jaikerazabi. También construyeron 200 casas al tradicional estilo Embera, con techos de paja y marcos circulares de madera. Otras ramas del gobierno siguieron con programas para apoyar a artistas, artesanos y la juventud indígena.
Torres vio que Giraldo podía proporcionar más que solo fuerza laboral y seguridad. “El ejército, guiado por Giraldo, ha sido de lo más valioso en la coordinación entre todas las instituciones del estado”, comentó.
Con el éxito del esfuerzo piloto en Jaikerazabi, la 7ª División está ahora planeando en la reconstruir ocho aldeas Indígenas más. Seis en el departamento de Antioquia, y dos en el departamento de Córdoba. Los proyectos van a beneficiar aproximadamente a 3.000 indígenas, incluyendo otras comunidades Embera así como miembros de las tribus Senú y Kuna.
Brazaletes, sombreros, pollos vivos y guanábanas
Líderes indios honraron recientemente a Giraldo, bautizándolo como uno de los suyos en una ceremonia donde se le dio una guanábana (una fruta nativa), un brazalete Embera, un sombrero volteao (un sombrero tejido a mano que también es el símbolo nacional colombiano) y un pollo vivo.
Aunque pudiera parecer poco ortodoxo que un general con la tarea de desenraizar y luchar contra tres diferentes frentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) esté preocupado con el bienestar de las poblaciones indígenas, Giraldo ve este trabajo como parte y parcela de su misión primaria. Las guerrillas, señaló, a menudo ocupan áreas que incluyen muchas reservas indígenas.
“La guerra es integral, no hay manera para desligar uno de los problemas”, comentó Giraldo al periódico de Medellín El Colombiano. “Y es más complicado ganar una guerra si no estás en el corazón de las comunidades, o las aldeas que uno representa”.
Hilda María Baldovino, líder tribal para 149 familias Senú en la reserva Vegas de Segovia en el municipio de Zaragoza, dijo que Giraldo había recientemente visitado su aldea, una de las ocho seleccionadas para reconstrucción. Caminó por la reserva con ella, escuchando sobre sus muchos problemas, entre los cuales la extrema pobreza y falta de escuelas.
“Lo que él va a traer y a hacer por mi aldea”, explicó, “es algo de lo que me enorgullezco”.
El ejército colombiano ayuda a reconstruir aldeas destruidas
Baldovino tomó parte en el foro del ejército, que se llevó a cabo en agosto, en la brigada principal en Medellín. El foro reunió a los líderes indígenas, los mandos militares y funcionarios de gobierno para discutir cuestiones que afectan a las tribus indígenas. Estas incluyen violaciones a los derechos humanos, deforestación y minería.
En su viaje, el camión de Baldovino se topó con protestas laborales y fue incendiado. Muchas de sus pertenencias se quemaron, pero aun así llegó al foro. “Soy una mujer fuerte” expresó. “Y estoy peleando por mi aldea, para que podamos tener una vida diferente”.
Marco Antonio Ruiz, líder de una tribu Senú en una reserva en el municipio de Necolí, dijo hace casi una década que los miembros de la tribu huyeron a sus tierras ancestrales, desarraigadas por la guerra y amenazadas por pandillas armadas. Muchos aún no han regresado.
“Estamos buscando la reconciliación entre el ejército y los indígenas porque antes nos sentíamos como que nos habían abandonado”, afirmó. “Ahora estamos buscando unirnos, trabajar brazo a brazo con las instituciones del estado”.
Jaikerazabi: ¿Un ejemplo para otras comunidades indígenas?
La actitud de Ruíz fue compartida en gran parte entre los participantes indígenas al foro, cuyas reservas están dentro de la jurisdicción de la 7ª División. Su deseo de cooperar con el ejército se torna más impresionante por el hecho de que hace como un año en el departamento suroeste de Cauca, la tribu Nasa —cansada de estar en medio del fuego cruzado de este conflicto tan largo— exigió que el ejército dejara sus tierras.
Carlos Salazar, director de la Oficina de los Indígenas en Antioquia, dijo que Giraldo y el trabajo del ejército con los indígenas es “notable” y que podría servir como lección a otros departamentos que la cooperación es posible.
Torres, el líder de los Embera Katío, explicó que otras comunidades indígenas se beneficiarán del tipo de colaboración que reconstruyó Jaikerazabi. “Es algo que se puede aplicar a cualquier comunidad indígena, aquí en el país o fuera de él”, dijo.
- En la página oficial de la compañía Sudáfricana MILKOR, quienes muy gentilmente han reproducido el artículo de mi autoría, titulado "EL MILKOR MGL MK-1L/S".
Yo si creo que es notoria la diferencia en capacidad de investigación, contactos y noticias, a la par que enlaces que hacen otros portales de lo que Erich ha escrito o informado.
No hay un Foro ni remotamente parecido a este en lo exclusivo y por eso digo, QUE SUERTE que contamos con un amigo como Erich que por si sólo es sinónimo de profesionalismo y prestigio.
El más reciente modo de operar de los grupos alzados en armas al plantar minas antipersona y otro tipo de artefactos explosivos busca dejar inservibles los sistemas metálicos detectores y dificultar el trabajo de los perros antiexplosivos.
Según miembros del Ejército Nacional, basta con rodear los artefactos con pegamento y otros olores que confundan al canino o que las minas sean cubiertas con plástico, lo que también –en algunas ocasiones- deja fuera de combate al detector de metales.
Ante el riesgo de que aumente el número de víctimas por minas antipersona en Norte de Santander, parte de las tropas que patrullan las zonas rurales de Tibú, La Gabarra y Hacarí están usando un elemento rústico y percibido como artesanal para evitar que los soldados y los campesinos resulten heridos o muertos.
Se trata del barreminas manual creado y acoplado por el capitán David Rojas, de la Fuerza de Tarea Vulcano de la Brigada 30.
El oficial explicó que el fin es generar la sensación de seguridad en los militares que patrullan parte de los municipios del Catatumbo,donde hay campos minados.
“Como los terroristas van cambiando su modo de operar, hemos implementado un elemento que activa de forma controlada un artefacto explosivo y que simula el primer paso de la persona. Es decir, que cuando el barreminas pisa, es como si pisara el pie de un humano, lo que hace explotar el artefacto de manera controlada”, explicó el creador.
Está hecho con un chasis de metal y cuatro ruedas de goma. Mide 30 centímetros de ancho. Tiene una longitud de expansión mínima para un área de 3,75 metros, lo que le da al soldado que lo maniobra la oportunidad de tener ventaja de reaccionar ante la onda explosiva.
Ha sido utilizado en Hacarí, donde el uniformado –asegura- ha salvado a los 36 hombres que componen la tropa, aunque no haya encontrado minas a su paso.
Pero, en la zona rural de Tibú el barreminas detonó un artefacto de menor peligrosidad, lo que preservó la seguridad de la comunidad.
El equipo se encuentra en Bogotá para ser presentado ante el Ministerio de Defensa, pues obtuvo el aval de la Brigada 30 y del general de la Fuerza de Tarea Vulcano, Marcolino Tamayo, lo que le ha permitido a Norte de Santander ser pionero en este tipo de equipos para enfrentar ese enemigo oculto de los uniformado y civiles.
Según las recomendaciones, el sistema tendrá acoples científicos y apoyo de la Industria Militar (Indumil), como la ampliación de hasta 30 metros de la barra expansiva, lo que permitirá la preservación de las tropas, pues el objetivo es que sea utilizado en todas las brigadas del país.
Entre los más golpeados
Desde 1990 hasta julio de este año, un total de 10.470 personas han sido víctimas de las minas antipersona en Colombia, de las cuales el 8%, corresponden a Norte de Santander.
Según cifras del Programa Presidencial para la Acción Integral contra las minas antipersonas, el departamento junto a Antioquia, Meta, Caquetá y Nariño son los más golpeados por la acción de esa clase de artefactos explosivos que son sembrados en los caminos y veredas.
Desde los 90 se han registrado, en Norte de Santander, 745 víctimas, de las cuales el 28% son civiles y el 72% son miembros de la Fuerza Pública.
Los municipios del Catatumbo que también han registrado la problemática son las zonas rurales de Hacarí, Convención, El Tarra, Hacarí, Tibú, San Calixto y Teorama.
Los mandos militares atribuyen a grupos armados ilegales la instalación de los explosivos para asegurar las zonas en que se encuentran los cultivos de coca en el Catatumbo.
EE. UU. buscaría países a donde enviar sus Fuerzas Especiales: informe
ONG advierten que a pesar de críticas, ese país sigue enviado dólares a la lucha contra el narco.
La influencia diplomática de Estados Unidos en Latinoamérica y el Caribe es cada vez más tenue. Sin embargo, su huella militar en la región continúa siendo fuerte y, de hecho, estaría creciendo, según un nuevo reporte presentado este miércoles en Washington por tres reconocidas ONG.
El informe, titulado ‘Es hora de escuchar’, sostiene que desde que comenzó el repliegue de las tropas estadounidenses de Afganistán e Irak, el número de Fuerzas Especiales enviadas a la región viene en aumento.
De acuerdo con Adam Isacson, experto en temas de seguridad de Wola y uno de los autores del reporte, EE. UU. estaría buscando países a donde enviar estos contingentes que ahora, con el fin de la guerra, están desocupados. En principio, las Fuerzas Especiales estarían trabajando en labores de inteligencia y entrenamiento.
El reporte sostiene que, en general, la ayuda de EE. UU. para Latinoamérica viene en franco descenso. De hecho, el pedido de recursos para el 2014 es el más bajo en más de una década.
En el caso de los recursos militares estos también se han recortado. De más de 1.600 millones que se entregaron en el 2010, se pasó a 900 para el 2014.
Una "huella light", según los autores del informe, pero que eleva preguntas dada la poca información que existe sobre el trabajo de estas fuerzas en la región.
Los autores también expresaron preocupación por la política estadounidense que busca entrenar a policías y militares colombianos para que estos se conviertan en entrenadores de otros países de Centroamérica y el Caribe.
Sostiene, también, que EE. UU. sigue concentrando la mayoría de sus dólares en la lucha y el control del narcotráfico, haciendo oídos sordos al clamor de una región que pide cambios en las estrategias anti narcóticas.
También expresan su temor por el incremento del uso de drones en la región. Según el reporte, ya son 11 países de la región los que poseen algún tipo de avión no tripulado y la tendencia es hacia la proliferación.
Colombia, por ejemplo, ha venido pidiendo a EE. UU. que le venda drones Predator, con capacidad para lanzar ataques militares.
La proliferación de drones, dice Isacson, es peligroso pues podría generar tensiones entre los países que se verían tentados al espiarse unos a otros.
El informe ofrece una serie de recomendaciones. Entre ellas le sugiere a EE. UU. que cambie el tipo de asistencia que le da a Colombia para que refleje las necesidades del proceso de paz.
Fuentes consultadas por EL TIEMPO en el Pentágono no ven las cosas de la misma manera. Para éstas, si bien es cierto que hay un aumento en la cantidad de misiones de fuerzas especiales a la región, éstas solo están regresando tras años de ausencia, los cuales fueron provocados por las necesidades de las guerras en Irak y Afganistán. Aún así, el número de misiones está muy lejos de los niveles que se registraban en los años 90.
Sostienen, a su vez, que muchos de los programas que financia el Pentágono buscan generar más transparencia y profesionalismo en las Fuerzas Armadas de países en la región.
Además de Wola, en el informe participaron el Centro para la Política Internacional (CIP) y el Fondo Educativo del Grupo de Trabajo para América Latina.
SERGIO GÓMEZ MASERI
Corresponsal de EL TIEMPO
Washington
DE LA DÉCIMA QUINTA BRIGADA EN EL CHOCÓ, AL CUARTEL GENERAL DEL COMANDO DEL EJERCITO
En las Últimas horas, el Comandante del Ejército, señor General Juan Pablo Rodríguez Barragán, nombró como nuevo Sargento Mayor de la Fuerza, al señor Sargento Mayor Henry Whislert Dulce Dulce, quien desde hace 15 meses se desempeñaba como el Asesor de Comando de la Décima Quinta Brigada, con sede en Quibdó, Chocó.
En su brillante carrera militar, el suboficial ha sido condecorado en 16 oportunidades por sus virtudes y condiciones profesionales. Realizó los cursos de combate de lancero, paracaidista, jefe de salto y comando del Ejército de los Estados Unidos. Así mismo, en los años 2006 y 2007 participó como instructor invitado en la Academia de Suboficiales Henry Caro en Fort Benning, Georgia y alumno de la Academia de Sargentos Mayores en Fort Bliss, Texas, durante los años 2011 y 2012.
Como Sargento Mayor, se desempeño como Asesor de Comando en la Brigada Movil No. 1, Escuela de Armas y Servicios y la Décima Quinta Brigada del Ejército.
Durante su permanencia en el departamento del Chocó, el Sargento Mayor Henry Dulce oriento los procesos de entrenamiento del personal de las Unidades Tácticas, contribuyó permanentemente en el manejo de las comunicaciones estratégicas y participo activamente en diferentes actividades orientadas a las campañas de prevención al reclutamiento de menores por parte de los grupos al margen de la ley, así como; al fortalecimiento de la disciplina, moral y bienestar de la Unidad Operativa Menor.
Su experiencia y conocimiento en diferentes áreas, le permitió convertirse en una pieza importante en la asesoría para la toma de decisiones del comandante de la Brigada y su Estado Mayor.
El Suboficial con 28 años al servicio de la Institución Militar, fue seleccionado para convertirse en el representante y líder de más de 33 mil suboficiales y 173 mil soldados que conforman el Ejército Nacional. Uno de los principales retos que afrontara en su nuevo cargo, será el fortalecimiento del plan de profesionalización de la carrera del suboficial que inicio su antecesor y la trasformación de los procesos de formación y entrenamiento de la fuerza.
Los Oficiales, Suboficiales, Soldados y Civiles que integramos la Décima Quinta Brigada del Ejército, nos sentimos honrados con esta nueva designación por parte del Comando del Ejército, la cual demuestra la importancia que reviste para el alto mando, la región del departamento del Chocó.
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Identifican a los 14 militares muertos y 8 heridos en emboscada de las Farc en Arauca
Sargento Segundo Walter Orlando Quiñones Becerra
Cabo Tercero Luis Ricardo Aguirre Terán
Soldado profesional Jeisson Albeiro García Bonilla
Soldado profesional Arley Mardonio Garzón Rojas.
Soldado regular Fernando Bueno Núñez
Soldado regular Héctor David Coronel Antolinez
Soldado regular José Antonio Galeano Garavito
Soldado regular Erley Díaz Ardila
Soldado regular Cristian Isaac Suárez Reyes
Soldado regular Luis Enrique Gutiérrez Ortíz
Soldado regular Jonathan Argenis Criollo Casas
Soldado regular Brajhan Felipe Espítia Vilaro
Soldado regular José Luis Duarte Jiménez
Soldado regular David Sebastián Galvis Forero.
Los soldados heridos
Soldado regular Oscar Díaz Maldonado
Soldado regular Jader Hernández Hernández
Soldado regular Juan Anacona Bueno
Estos dos últimos reciben atención médica en el hospital San Vicente de Paúl en Arauca.
Otros dos uniformados fueron remitidos al hospital Militar en Bogotá.
Los soldados profesionales Franklin Murillo, Camilo Esneider Guerra, Alexander Rolón Palacios y Carlos García Criado, presentaron lesiones leves de aturdimiento y desarticulación de huesos, siendo valorados en el hospital San Antonio de Tame.
http://www.caracol.com.co/noticias/judiciales/identifican-14-militares-muertos-y-8-heridos-en-emboscada-de-las-farc-en-arauca/20130825/nota/1957293.aspx
http://www.eltiempo.com/justicia/mueren-militares-en-ataque-de-las-farc-en-tolima-_13036811-4
Paz en la tumba de estos heroes, y que por favor alguien haga algo, porque este país le quedó grande a la caricatura que tenemos por presidente...
MEDELLÍN, Colombia — Justo después de la medianoche del Día de Año Nuevo, el líder de la tribu Embera Katío, Reinaldo Domico —antropólogo y activista de los derechos indígenas— estaba cambiando la música en su estéreo cuando un hombre irrumpió en su casa en las montañas norteñas de Colombia. El asaltante, enmascarado por un pasamontañas negro, le disparó a Domico cuatro veces en la espalda y la cabeza.
El asesino de Domico no ha sido identificado ni capturado, pero otros miembros de la tribu Embera Katío especulan que Domico fue asesinado a causa del sus esfuerzos por trabajar con el gobierno colombiano, incluyendo el ejército, para reconstruir su aldea.
“Desde el momento que tomamos la decisión de trabajar en conjunto con el estado, hemos sido objetivo”, dijo Héctor Torres, otro líder tribal de Embera Katío, en un foro patrocinado por el Ejército el mes pasado en Medellín. “Pero decidimos correr el riesgo porque cruzarnos de brazos y ver a nuestra gente morir de necesidad no es una solución”.
La aldea de Torres, en la reserva de Jaikerazabi al noroeste de Colombia, ha visto los beneficios de la cooperación con el ejército. En 2011, se convirtió en el primero de nueve pueblos indígenas que la 7ª División del ejército está reconstruyendo — en una región cuyas tribus durante mucho tiempo se han visto lanzados a conflictos entre las guerrillas de la izquierda y los paramilitares de la derecha y pandillas de narcotraficantes.
El Gen. Hernán Giraldo es ‘la fuerza impulsora’ detrás del proyecto
La fuerza impulsora detrás del involucramiento del ejército en la reconstrucción de Jaikerazabi era el Gen. Hernán Giraldo, comandante de la 7ª División.
Bajo las órdenes de Giraldo, los ingenieros del ejército construyeron carreteras, escuelas, salones comunitarios y un centro de salud en Jaikerazabi. También construyeron 200 casas al tradicional estilo Embera, con techos de paja y marcos circulares de madera. Otras ramas del gobierno siguieron con programas para apoyar a artistas, artesanos y la juventud indígena.
Torres vio que Giraldo podía proporcionar más que solo fuerza laboral y seguridad. “El ejército, guiado por Giraldo, ha sido de lo más valioso en la coordinación entre todas las instituciones del estado”, comentó.
Con el éxito del esfuerzo piloto en Jaikerazabi, la 7ª División está ahora planeando en la reconstruir ocho aldeas Indígenas más. Seis en el departamento de Antioquia, y dos en el departamento de Córdoba. Los proyectos van a beneficiar aproximadamente a 3.000 indígenas, incluyendo otras comunidades Embera así como miembros de las tribus Senú y Kuna.
Brazaletes, sombreros, pollos vivos y guanábanas
Líderes indios honraron recientemente a Giraldo, bautizándolo como uno de los suyos en una ceremonia donde se le dio una guanábana (una fruta nativa), un brazalete Embera, un sombrero volteao (un sombrero tejido a mano que también es el símbolo nacional colombiano) y un pollo vivo.
Aunque pudiera parecer poco ortodoxo que un general con la tarea de desenraizar y luchar contra tres diferentes frentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) esté preocupado con el bienestar de las poblaciones indígenas, Giraldo ve este trabajo como parte y parcela de su misión primaria. Las guerrillas, señaló, a menudo ocupan áreas que incluyen muchas reservas indígenas.
“La guerra es integral, no hay manera para desligar uno de los problemas”, comentó Giraldo al periódico de Medellín El Colombiano. “Y es más complicado ganar una guerra si no estás en el corazón de las comunidades, o las aldeas que uno representa”.
Hilda María Baldovino, líder tribal para 149 familias Senú en la reserva Vegas de Segovia en el municipio de Zaragoza, dijo que Giraldo había recientemente visitado su aldea, una de las ocho seleccionadas para reconstrucción. Caminó por la reserva con ella, escuchando sobre sus muchos problemas, entre los cuales la extrema pobreza y falta de escuelas.
“Lo que él va a traer y a hacer por mi aldea”, explicó, “es algo de lo que me enorgullezco”.
El ejército colombiano ayuda a reconstruir aldeas destruidas
Baldovino tomó parte en el foro del ejército, que se llevó a cabo en agosto, en la brigada principal en Medellín. El foro reunió a los líderes indígenas, los mandos militares y funcionarios de gobierno para discutir cuestiones que afectan a las tribus indígenas. Estas incluyen violaciones a los derechos humanos, deforestación y minería.
En su viaje, el camión de Baldovino se topó con protestas laborales y fue incendiado. Muchas de sus pertenencias se quemaron, pero aun así llegó al foro. “Soy una mujer fuerte” expresó. “Y estoy peleando por mi aldea, para que podamos tener una vida diferente”.
Marco Antonio Ruiz, líder de una tribu Senú en una reserva en el municipio de Necolí, dijo hace casi una década que los miembros de la tribu huyeron a sus tierras ancestrales, desarraigadas por la guerra y amenazadas por pandillas armadas. Muchos aún no han regresado.
“Estamos buscando la reconciliación entre el ejército y los indígenas porque antes nos sentíamos como que nos habían abandonado”, afirmó. “Ahora estamos buscando unirnos, trabajar brazo a brazo con las instituciones del estado”.
Jaikerazabi: ¿Un ejemplo para otras comunidades indígenas?
La actitud de Ruíz fue compartida en gran parte entre los participantes indígenas al foro, cuyas reservas están dentro de la jurisdicción de la 7ª División. Su deseo de cooperar con el ejército se torna más impresionante por el hecho de que hace como un año en el departamento suroeste de Cauca, la tribu Nasa —cansada de estar en medio del fuego cruzado de este conflicto tan largo— exigió que el ejército dejara sus tierras.
Carlos Salazar, director de la Oficina de los Indígenas en Antioquia, dijo que Giraldo y el trabajo del ejército con los indígenas es “notable” y que podría servir como lección a otros departamentos que la cooperación es posible.
Torres, el líder de los Embera Katío, explicó que otras comunidades indígenas se beneficiarán del tipo de colaboración que reconstruyó Jaikerazabi. “Es algo que se puede aplicar a cualquier comunidad indígena, aquí en el país o fuera de él”, dijo.
http://www.dialogo-americas.com/es/articles/rmisa/features/regional_news/2013/09/03/colombia-indigenous
Gracias a una gentil participación de la embajada del gobierno de los Estados Unidos y del Reino Unido.
Siempre en la jugada.
http://milkor.co.za/news.html#MGL
- En la página oficial de la compañía Sudáfricana MILKOR, quienes muy gentilmente han reproducido el artículo de mi autoría, titulado "EL MILKOR MGL MK-1L/S".
(para quienes deseen leerlo en español: http://www.entrelibros.co/blog/el-milkor-mgl-mk-1ls/ )
Primero en Americamilitar.com
Yo si creo que es notoria la diferencia en capacidad de investigación, contactos y noticias, a la par que enlaces que hacen otros portales de lo que Erich ha escrito o informado.
No hay un Foro ni remotamente parecido a este en lo exclusivo y por eso digo, QUE SUERTE que contamos con un amigo como Erich que por si sólo es sinónimo de profesionalismo y prestigio.
Auf Wiedersehen.
El barreminas, la ‘otra pierna’ de un soldado
El más reciente modo de operar de los grupos alzados en armas al plantar minas antipersona y otro tipo de artefactos explosivos busca dejar inservibles los sistemas metálicos detectores y dificultar el trabajo de los perros antiexplosivos.
Según miembros del Ejército Nacional, basta con rodear los artefactos con pegamento y otros olores que confundan al canino o que las minas sean cubiertas con plástico, lo que también –en algunas ocasiones- deja fuera de combate al detector de metales.
Ante el riesgo de que aumente el número de víctimas por minas antipersona en Norte de Santander, parte de las tropas que patrullan las zonas rurales de Tibú, La Gabarra y Hacarí están usando un elemento rústico y percibido como artesanal para evitar que los soldados y los campesinos resulten heridos o muertos.
Se trata del barreminas manual creado y acoplado por el capitán David Rojas, de la Fuerza de Tarea Vulcano de la Brigada 30.
El oficial explicó que el fin es generar la sensación de seguridad en los militares que patrullan parte de los municipios del Catatumbo,donde hay campos minados.
“Como los terroristas van cambiando su modo de operar, hemos implementado un elemento que activa de forma controlada un artefacto explosivo y que simula el primer paso de la persona. Es decir, que cuando el barreminas pisa, es como si pisara el pie de un humano, lo que hace explotar el artefacto de manera controlada”, explicó el creador.
Está hecho con un chasis de metal y cuatro ruedas de goma. Mide 30 centímetros de ancho. Tiene una longitud de expansión mínima para un área de 3,75 metros, lo que le da al soldado que lo maniobra la oportunidad de tener ventaja de reaccionar ante la onda explosiva.
Ha sido utilizado en Hacarí, donde el uniformado –asegura- ha salvado a los 36 hombres que componen la tropa, aunque no haya encontrado minas a su paso.
Pero, en la zona rural de Tibú el barreminas detonó un artefacto de menor peligrosidad, lo que preservó la seguridad de la comunidad.
El equipo se encuentra en Bogotá para ser presentado ante el Ministerio de Defensa, pues obtuvo el aval de la Brigada 30 y del general de la Fuerza de Tarea Vulcano, Marcolino Tamayo, lo que le ha permitido a Norte de Santander ser pionero en este tipo de equipos para enfrentar ese enemigo oculto de los uniformado y civiles.
Según las recomendaciones, el sistema tendrá acoples científicos y apoyo de la Industria Militar (Indumil), como la ampliación de hasta 30 metros de la barra expansiva, lo que permitirá la preservación de las tropas, pues el objetivo es que sea utilizado en todas las brigadas del país.
Entre los más golpeados
Desde 1990 hasta julio de este año, un total de 10.470 personas han sido víctimas de las minas antipersona en Colombia, de las cuales el 8%, corresponden a Norte de Santander.
Según cifras del Programa Presidencial para la Acción Integral contra las minas antipersonas, el departamento junto a Antioquia, Meta, Caquetá y Nariño son los más golpeados por la acción de esa clase de artefactos explosivos que son sembrados en los caminos y veredas.
Desde los 90 se han registrado, en Norte de Santander, 745 víctimas, de las cuales el 28% son civiles y el 72% son miembros de la Fuerza Pública.
Los municipios del Catatumbo que también han registrado la problemática son las zonas rurales de Hacarí, Convención, El Tarra, Hacarí, Tibú, San Calixto y Teorama.
Los mandos militares atribuyen a grupos armados ilegales la instalación de los explosivos para asegurar las zonas en que se encuentran los cultivos de coca en el Catatumbo.
http://www.laopinion.com.co/demo/index.php?option=com_content&task=view&id=428688&Itemid=28#.UjmfjfFDUNY.twitter
ONG advierten que a pesar de críticas, ese país sigue enviado dólares a la lucha contra el narco.
La influencia diplomática de Estados Unidos en Latinoamérica y el Caribe es cada vez más tenue. Sin embargo, su huella militar en la región continúa siendo fuerte y, de hecho, estaría creciendo, según un nuevo reporte presentado este miércoles en Washington por tres reconocidas ONG.
El informe, titulado ‘Es hora de escuchar’, sostiene que desde que comenzó el repliegue de las tropas estadounidenses de Afganistán e Irak, el número de Fuerzas Especiales enviadas a la región viene en aumento.
De acuerdo con Adam Isacson, experto en temas de seguridad de Wola y uno de los autores del reporte, EE. UU. estaría buscando países a donde enviar estos contingentes que ahora, con el fin de la guerra, están desocupados. En principio, las Fuerzas Especiales estarían trabajando en labores de inteligencia y entrenamiento.
El reporte sostiene que, en general, la ayuda de EE. UU. para Latinoamérica viene en franco descenso. De hecho, el pedido de recursos para el 2014 es el más bajo en más de una década.
En el caso de los recursos militares estos también se han recortado. De más de 1.600 millones que se entregaron en el 2010, se pasó a 900 para el 2014.
Una "huella light", según los autores del informe, pero que eleva preguntas dada la poca información que existe sobre el trabajo de estas fuerzas en la región.
Sostiene, también, que EE. UU. sigue concentrando la mayoría de sus dólares en la lucha y el control del narcotráfico, haciendo oídos sordos al clamor de una región que pide cambios en las estrategias anti narcóticas.
El informe ofrece una serie de recomendaciones. Entre ellas le sugiere a EE. UU. que cambie el tipo de asistencia que le da a Colombia para que refleje las necesidades del proceso de paz.
Fuentes consultadas por EL TIEMPO en el Pentágono no ven las cosas de la misma manera. Para éstas, si bien es cierto que hay un aumento en la cantidad de misiones de fuerzas especiales a la región, éstas solo están regresando tras años de ausencia, los cuales fueron provocados por las necesidades de las guerras en Irak y Afganistán. Aún así, el número de misiones está muy lejos de los niveles que se registraban en los años 90.
Sostienen, a su vez, que muchos de los programas que financia el Pentágono buscan generar más transparencia y profesionalismo en las Fuerzas Armadas de países en la región.
Además de Wola, en el informe participaron el Centro para la Política Internacional (CIP) y el Fondo Educativo del Grupo de Trabajo para América Latina.
SERGIO GÓMEZ MASERI
Corresponsal de EL TIEMPO
Washington
En las Últimas horas, el Comandante del Ejército, señor General Juan Pablo Rodríguez Barragán, nombró como nuevo Sargento Mayor de la Fuerza, al señor Sargento Mayor Henry Whislert Dulce Dulce, quien desde hace 15 meses se desempeñaba como el Asesor de Comando de la Décima Quinta Brigada, con sede en Quibdó, Chocó.
En su brillante carrera militar, el suboficial ha sido condecorado en 16 oportunidades por sus virtudes y condiciones profesionales. Realizó los cursos de combate de lancero, paracaidista, jefe de salto y comando del Ejército de los Estados Unidos. Así mismo, en los años 2006 y 2007 participó como instructor invitado en la Academia de Suboficiales Henry Caro en Fort Benning, Georgia y alumno de la Academia de Sargentos Mayores en Fort Bliss, Texas, durante los años 2011 y 2012.
Como Sargento Mayor, se desempeño como Asesor de Comando en la Brigada Movil No. 1, Escuela de Armas y Servicios y la Décima Quinta Brigada del Ejército.
Durante su permanencia en el departamento del Chocó, el Sargento Mayor Henry Dulce oriento los procesos de entrenamiento del personal de las Unidades Tácticas, contribuyó permanentemente en el manejo de las comunicaciones estratégicas y participo activamente en diferentes actividades orientadas a las campañas de prevención al reclutamiento de menores por parte de los grupos al margen de la ley, así como; al fortalecimiento de la disciplina, moral y bienestar de la Unidad Operativa Menor.
Su experiencia y conocimiento en diferentes áreas, le permitió convertirse en una pieza importante en la asesoría para la toma de decisiones del comandante de la Brigada y su Estado Mayor.
El Suboficial con 28 años al servicio de la Institución Militar, fue seleccionado para convertirse en el representante y líder de más de 33 mil suboficiales y 173 mil soldados que conforman el Ejército Nacional. Uno de los principales retos que afrontara en su nuevo cargo, será el fortalecimiento del plan de profesionalización de la carrera del suboficial que inicio su antecesor y la trasformación de los procesos de formación y entrenamiento de la fuerza.
Los Oficiales, Suboficiales, Soldados y Civiles que integramos la Décima Quinta Brigada del Ejército, nos sentimos honrados con esta nueva designación por parte del Comando del Ejército, la cual demuestra la importancia que reviste para el alto mando, la región del departamento del Chocó.
http://brigada15.blogspot.com/2013/09/de-la-decima-quinta-brigada-en-el-choco.html
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